Ojkr.- 12-ago-07
La mala intromisión.-
Se deja ver tarde y nunca. Viene con cara de intimidad y secreto y te suelta una serie de información que no has pedido…que no quieres. Que no te interesa. Te sonsaca.
Puede parecer un acto amistoso o de extrema confianza, pero en el fondo se esconde la bestia del cotilleo.
Hay gente con una necesidad irrefrenable de sentirse centro de atención, o sentirse mirada o admirada. Gente que sería capaz de cualquier cosa para conseguirlo. Capaz incluso de contar cosas que no se deben contar, a personas que no pueden saber ciertas cosas.
Pura maldad compulsiva de hablar por hablar. Sin querer.
Se ocultan bajo un manto de interés que te desinhibe y te aboca a contarles cosas más o menos intimas. Y luego almacenan toda esa información para acaparar la atención en momentos escogidos. A conciencia.
Ponen su hombro a tu disposición para que lo uses como basurero…pero en realidad te encuentras ante un contenedor de reciclaje de noticias, donde todo sirve para ser reutilizado.
Todo.
Cuidado.
Atención.
jueves, 16 de agosto de 2007
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario